Preocuparte es siempre una mala idea

La Señorita Crisis
 

¿Sabes qué le dice un MyFriend a la Señorita Crisis?
You are welcome! Pasa y siéntate.

Crisis indica una ruptura, un camino no esperado, una situación que no estaba prevista en el guion y que conviene analizar.

Los Millennials ya nos ha tocado vivir una, y gorda.
2008 siempre formará parte de nuestra memoria.

Pero más allá a las que nos toca vivir y compartir como generación,
Las crisis llegan cuando les da la gana.

Son como esos amigos que aparecen cuando nadie les llama y encima son más ruidosos que una ametralladora de asfalto y encima… ¡te estresan y solo deseas que se vayan!

Una de las cosas curiosas de las crisis, es que son las que nos obligan a pensar.

Exacto, pensar.

Y cuando eso ocurre nuestro cerebro realiza un estudio y análisis para la mejoraevolucióncambio de hábitos que son el prólogo de una transformación.

Y por supuesto una oportunidad para el crecimiento mental, emocional y de los hábitos individuales y colectivos.


Toda crisis nos abre las puertas de la transformación, y con ella aparece la fragilidad, la unidad, el cuestionamiento, la rebeldía necesaria y por supuesto la empatía.

Nadie, por mucho que nos ame, ni por muy bien que nos conozca, puede decirnos qué sentido tiene la crisis que nos toca vivir.

De hecho, lo más probable que es que cuando estés en ella la frase que más escuches sea: «ánimo y que tengas suerte»

MyFriend, nos toca conocer y vivir crisis y, muchas, y quizás estas en una ahora mismo o quizás te visita pronto… pero eso, ni la pitonisa Lola lo sabe.

Si eso ocurre, cada uno de nosotros debe encontrar el sentido reparador de su visita a partir de la introspección personal.

Seamos francos: Cambiar, cambiarse, nunca ha estado relacionado con «coser y cantar» o con «un camino despejado».

De hecho, las crisis no se eligen, pero la transformación si.

Yo te ayudo a que no caigas, a contagiarte de fuerza y energía y, en consecuencia prevenir, lo que sabes e intuyes que va a pasar si no coges el toro por los cuernos.

Puedes buscarte como socio a alguien te mire con cara de lástima y te diga un: ostras, no te preocupes, ya verás cómo te irá bien.

O puedes tener a un socio, que no te mire ni con pena ni juzgándote, que se pone manos a la obra contigo para sacar tu fortaleza más genuina y que todo se haga más fácil.

Yo soy este segundo socio, MyFriend.

¿Nos ponemos manos a la obra?
 
 

Clara Vilaseca 

Socia de crecimiento y coach financiera Millennial

Para el desarrollo personal y profesional

Coaching Emocional y Coaching Financiero Online 

¡Transforma tu vida y tus finanzas!

APRENDE, MEJORA Y AVANZA

«Solo cuando te conoces en profundidad decides quién quieres ser y cómo quieres vivir.»